IKEA y Microsoft quieren que los gais puedan donar sangre en Alemania

Trece grandes empresas, entre las que se encuentran IKEA, Microsoft y Continental, quieren que el gobierno alemán facilite la donación de sangre por parte de homosexuales y bisexuales. Por el momento, los hombres que practican el sexo son otros hombres solo pueden donar sangre después de doce meses de abstinencia.
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En una carta abierta, las empresas defienden que, en las circunstancias actuales, todos los homosexuales deberían poder donar sangre. Presuponer que las personas LGBT+ tienen «comportamientos sexuales de riesgo» es inaceptable, según el gigante sueco del mobiliario doméstico y la multinacional tecnológica. También han firmado la carta la empresa de ferrocarriles alemana y el fabricante de ascensores Thyssenkrupp.

Alemania es uno de los numerosos países en los que hay normas de donación de sangre específicas para los hombres que tienen sexo con otros hombres. Estas normas se adoptaron al final del siglo pasado a consecuencia de la crisis del sida. «La evaluación del riesgo de ser portador del VIH debe basarse en el comportamiento individual y no en la orientación sexual», afirma Barbara Thiel, responsable del área de diversidad e inclusión de Thyssenkripp, a la agencia Reuters. En la carta, los firmantes hacen referencia a otros países con normas menos restrictivas.

Dentro de Europa, los estándares de donación para hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres son variopintos. En Países Bajos y Dinamarca, el periodo de abstinencia se ha rebajado recientemente a cuatro meses. Este año, Francia ha decidido adoptar ese mismo periodo. En el Reino Unido baja hasta «solamente» tres meses, mientras que en España, Italia y Portugal no hay directivas específicas para este grupo: lo que se evalúa es el comportamiento sexual individual, independientemente de la orientación sexual.

Debido a la crisis del COVID-19, Estados Unidos también cambió su normativa de donación y rebajó el periodo de abstinencia a tres meses. Sin embargo, estos plazos de tres o cuatro meses siguen generando multitud de críticas. Las asociaciones que defienden los derechos LGBT+ sostienen que sigue siendo una barrera infranqueable, ya que los individuos sexualmente activos suelen tener relaciones más de una vez cada tres meses. Bélgica, Suecia, Noruega, Irlanda y Finlandia mantienen un periodo de doce meses, mientras que Austria niega definitivamente a este grupo de la posibilidad de donar sangre.

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