James David Vance, más conocido como "JD" Vance, es el nuevo número dos de la campaña de Trump. El senador por Ohio se convertiría en vicepresidente si Trump fuese reelegido Presidente. Las organizaciones LGTB+ están preocupadas por las numerosas declaraciones homófobas que Vance ha realizado a lo largo de su carrera política. Asimismo, también genera preocupación entre estas organizaciones su histórico de proyectos de ley transfóbicos.
Uno de estos proyectos de ley redactados por Vance hubiera prohibido proporcionar cuidados a menores transgénero, habiendo llegando a establecer penas de prisión de hasta 15 años en el mismo. Llamó a esta propuesta "Ley de Protección de la Inocencia de los Niños", en la que se tildaba de "horrible" la atención a menores transgénero. Además, dicho proyecto de ley establecía que las personas que atendieran a menores transgénero en el extranjero no podrían obtener visados para entrar en Estados Unidos.
Durante su carrera como senador, Vance presentó otro proyecto de ley para eliminar la opción de tener una "X" en los pasaportes. "Sólo hay dos géneros; los pasaportes expedidos por el gobierno de Estados Unidos deberían reconocer este simple hecho", declaró Vance sobre su propuesta. Ambos proyectos de ley fueron paralizados en una etapa temprana.
Poco antes de la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia, Vance afirmó que el Presidente Joe Biden estaba considerando una guerra con Rusia "porque Putin no cree en los derechos de las personas transgénero". También tuiteó que el término "dos espíritus", utilizado por muchos indígenas estadounidenses para referirse a su identidad de género, fue "inventado" por los "progresistas". Además, Vance cree que la orientación sexual y la identidad de género no deberían ser parte de la legislación contra la discriminación, y está en contra de establecer legalmente el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Vance también participa de los numerosos ataques del Partido Republicano relativos a la educación sobre la comunidad LGTB+. Llamó a los demócratas "predadores" y los acusó de "intentar sexualizar a niños de seis o siete años".
De niño, Vance estaba convencido de que era homosexual porque no le interesaban las chicas. Lo cuenta en sus memorias, Hillbilly Elegy. Su abuela lo convenció de que era heterosexual al preguntarle: “JD, ¿quieres chupar pollas?”. “¡Claro que no!”, fue la respuesta de Vance, de ocho años, haciéndole darse cuenta de que no tenía sentimientos homosexuales.
Vance, que vive en el barrio LGTB+ de Washington D.C., lleva tiempo en el radar de los activistas LGTB+. Por ejemplo, en su casa se colgaron banderas del Orgullo tejidas con el texto "respeta nuestros derechos". La presidenta de la organización LGTB+ GLAAD, Sarah Kate Ellis, respondió a la noticia sobre la nominación de Vance diciendo: "GLAAD insta a todos los medios de comunicación que cubren la elección para vicepresidente de Trump a incluir su historial de retórica y política anti-LGTBQ. Los estadounidenses LGTBQ son contribuyentes, miembros de familias, colegas, compañeros de clase, vecinos y amigos, (...) Nuestras preocupaciones no son un espectáculo secundario de la 'guerra cultural': son fundamentales para los temas centrales de esta elección."