A comienzos de este mes, la policía detuvo a los activistas que habían envuelto varias estatuas (incluida una de Jesucristo) con la bandera arcoíris, bajo la acusación de «deshonrarlas». De acuerdo con el artículo 196 del código penal polaco, cualquier persona que «ofenda los sentimientos religiosos de los demás denigrando públicamente objetos o lugares de culto» puede ser condenada a penas de hasta dos años de prisión.

Aunque los activistas fueron puestos en libertad después de 40 horas, uno de ellos volvió a ser detenido el viernes pasado. Se trata de la persona no binaria Malgorzata Szutowicz, más conocida como Margot. Un portavoz policial explicó que el arresto (que durará al menos dos meses, dependiendo de las investigaciones en curso) tiene relación con otro incidente. Según la agencia Reuters, se trata de los desperfectos ocasionados al autobús de un grupo antiabortista.

De forma espontánea, cientos de personas intentaron impedir que la policía detuviera a Margot, pero los agentes disolvieron la protesta y consiguieron evacuar al detenido en un furgón. De acuerdo con la información de Reuters, al menos 48 personas que intentaron bloquear el paso del furgón fueron detenidas. El sábado 8 de agosto se produjo una gran protesta en el centro de Varsovia, esta vez organizada, en la que miles de personas exigieron la liberación de Margot. Todos los manifestantes fueron liberados el sábado, excepto el propio Margot.