La estatua apareció adornada con una bandera arcoíris y una bandana rosa con un símbolo anarquista. La organización Stop Bzdurom también colocó una bandera y una bandana sobre las estatuas de bronce del matemático y astrónomo Nicolás Copérnico y de la mascota de la ciudad, la Sirena de Varsovia.

Stop Bzdurom (“basta de tonterías”), un colectivo radical queer y feminista, reivindicó la acción a través de las redes sociales, donde también publicaron un manifiesto. «Hemos decidido actuar. Mientras no pueda ir contigo de la mano. Hasta que desaparezca el último rastro de homofobia. Esta es la manifestación de que somos diferentes: el arcoíris».

El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, manifestó en Facebook que, en su opinión, esta protesta ha ido más allá de lo tolerable. «No respetar las ideas de la mayoría no hace que las minorías ganen apoyos, sino más enemigos».

Stop Bzdurom pide ayuda a sus simpatizantes, ya que Morawiecki ha dado instrucciones a la fiscalía para que intervenga en el asunto de la bandera arcoíris, alegando que constituye una blasfemia. «La última vez que ocurrió algo similar, hubo registros en casa de los acusados, y sus ordenadores fueron confiscados», afirma Stop Bzdurom en Twitter.